DE VIAJE POR... CUANDO MADRUGAR COMPENSA
CON CRECES
Posted on abril 11 by
requiebrosytrochas
Los despertadores sonaban hoy a una
hora inusual, demasiado pronto para un sábado, pero a ninguno se le pegó las
sábanas y a las 5:00 nos citábamos en la ermita para subir a la sierra. La primera
sorpresa fue que Fran se unía a la aventura…
La idea era llegar de noche y empezar
el recorrido con los frontales calados en nuestras frentes para subir el
kilómetro vertical de La Barranca y llegar al amanecer a lo alto de la montaña
mítica:
La Maliciosa. Los planes se cumplieron
y el amanecer nos regaló un día claro, templado y sin viento. Aprovechamos ese
buen tiempo y esas vistas de un sol naciente espectacular para una sesión de
fotos… como siempre. En este punto Gustavo se separó de nosotros porque tenía
obligaciones familiares y celebrar su cumpleaños. Muchas gracias por vivirlo con
nosotros y te esperamos siempre que quieras porque tú también eres un requiebro
o una trocha, al gusto.
En lo alto de La Maliciosa
empalmábamos con el recorrido del Cross de los Tres Refugios para empezar el
técnico recorrido hasta La Pedriza. La bajada fue rápida como el ascenso del
sol en el cielo. Llegados cerca de Cantocochinos decidimos atrochar para
acortar el recorrido. Aquí empezó la aventura de saltar y reptar las vallas que
nos íbamos encontrando; vadeando riachuelos en los que nos calábamos y
atravesando tollas que empapaban nuestros pies.
Por fin encontramos el camino y ya
sólo quedaba subir por una zona impresionante. El camino pasa por bosques de
pinos y zetas ascendentes sin pausa. Cuando la altitud superó los 1700 metros el
paisaje cambió y quedó un valle de tolla con un riachuelo caudaloso con pequeñas
cataratas. Simplemente espectacular.
Al final evitamos ascender por el
Ventisquero de la Condesa para ir directamente a Los Porrones por una subida
sin marcar, sin camino y llena de bajomonte. Ahí el tiempo se estropeó y nos cubrió
unas nubes tormentosas pero que nos respetaron.
Ya sólo quedaba bajar de nuevo La
Barranca y llegar a los coches. El descenso fue más largo de lo debido por los
problemas físicos de Alberto en la rodilla pero que no le hicieron perder su optimismo
y siempre agradable compañía, en la próxima vuelves y deja de disculparte.
Mención especial al señor Briega que
hoy ha demostrado lo en forma que está. Ha subido y bajado como un lince, esperándonos
y siempre con su sonrisa dibujada en la cara. Estás tremendo amigo, tremendo.
Sara cuídale mucho…
Las caras de circunstancia se dibujaba
en Marcos, otro extraterreste en la montaña, y en la mía que teníamos a
nuestras queridas mujeres esperando. Perdonarnos que ha sido “sin querer”…
Al final la mañana en números se
resume en 28km y 1900 m de desnivel positivo.
Buenas sensaciones en general y con la
certeza de haber pasado una gran mañana, como siempre, con gente tan
excepcional.
Hoy, como muchas veces… PURA VIDA.
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